Concurso Leer a Martí 2000. Hermosa la fantasía de los niños.

19/11/2020
Por: Jessica Álvarez Bellas, Biblioteca Nacional José Martí

Hoy creo les gustara leer esto de una niña de 4to grado, con solo 9 años y que fue ganadora del 2000 del Concurso Leer a Martí, ella es de Villa Clara y estaba en la Escuela Carmen Hernández, en su lectura encontraran mucha imaginación. 

Mi fantasía

Yari González Mesa

Un día, cuando venía con el pan para mi casa, vi a un grupo de personas que no eran de mi barrio. ¡Pero qué extrañas!, vestían con ropas pasadas de moda y otras con mucha elegancia para la hora y el lugar.

Mientras me fui acercando vi que hacían comentarios con un hombre de mirada noble y bigote grande. Cuando llegué al lugar los conocí a todos

Alguien se acercó y me dijo: - ¿Qué haces ahí tan solitaria? Yo no supe qué decir, pero me di cuenta de que mi vecina no los podía ver, ya que ella no tiene la fantasía suficiente y seguramente no ha leído los libros de Martí. Pero a ustedes sí se los contaré

Era José Martí reunido con algunos de los personajes de La Edad de Oro y explicándoles el porqué de sus características. En ese momento estaba hablando con Nene traviesa, le decía que con su personaje los niños debían aprender que no se maltratan los libros, pero principalmente que no se debe herir los sentimientos de los demás, para que no sufran como sufrió su padre

Después conversó muy tranquilamente con Pilar y con Meñique diciendo que en ella había puesto la bondad y los buenos sentimientos, y en él la astucia y la sabiduría sin importar el tamaño. A Loppi le dijo algo sobre la ambición y la cobardía mirando a Piedad le dijo: -a ti no tengo que explicarte mucho, porque todos los niños saben que existe una sola raza, la humana. Y en ese momento recordé que mi mamá debía estar preocupada

Cuando llegué a mi casa tenía muchos deseos de regañarme, enseguida le conté, ella emocionada me dijo: - ¿No viste a los 2 príncipes?

Yo le dije que no, entonces me explicó que estos son 2 personajes creados por Martí para que conociéramos las diferencias de clases que existían cuando él vivía y que todavía existen en otros países. Yo quedé pensativa, pero me llamaron para almorzar…