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Foto de 120 Aniversario BNCJM- De la historia contada por las revistas cubanas de los sesenta. La revolución del libro cubano

120 Aniversario BNCJM- De la historia contada por las revistas cubanas de los sesenta. La revolución del libro cubano

4/4/2021
Por: Vilma N. Ponce Suárez, Biblioteca Nacional José Martí

En realidad, Leonel López Nussa en su reportaje “Aventuras del pensamiento: el nuevo libro cubano” trató más de los éxitos recientes en la producción y comercialización del libro, que de sus dificultades (1). El trabajo salió publicado en la edición de agosto de 1960 de la revista “INRA”, de la cual el pintor llegó a ser uno de los redactores más productivos(2)

El despegue de la industria editorial había ocurrido el 31 de marzo de 1959 con la creación de la Imprenta Nacional de Cuba, bajo la dirección del eminente escritor Alejo Carpentier. Poco tiempo después, en septiembre y diciembre de ese año, se celebraron los festivales del libro. En el reportaje se aseguró que en cada uno de los encuentros fueron vendidas 25 mil colecciones, lo cual constituyó un hecho sin precedentes en el país. Los cambios en esta esfera eran palpables, pues de una limitada edición de obras antes de la Revolución, ahora, en sólo pocos meses, se colmaban los estantes de las librerías.      

Acerca de esta transformación cultural hablaron Alejo Carpentier y los directores de las editoriales privadas “Editorial “Lex” y “Ediciones La Tertulia”. Este último propietario manifestó algunas preocupaciones respecto a la gran cantidad de libros producidos y la posibilidad de que no tuvieran salida en el mercado; la no existencia de una tarifa para la exportación de obras a costo reducido y acerca de las trabas aduanales provocadas por medidas burocráticas. No obstante, en el reportaje preponderó la exaltación de la labor realizada por la Imprenta Nacional y las diversas editoriales existentes en ese momento, al entregar numerosos libros instructivos y de entretenimiento al pueblo.  “Libros, libros y más libros” y “Libros a granel” fueron dos de los intertítulos que ratifican lo antes señalado.

López Nussa entrevistó a Marcia Leiceca, representante de la Casa de las Américas, quien se refirió a la edición de las obras premiadas en el primer concurso literario hispanoamericano convocado por ese organismo. Intervinieron por la Imprenta Nacional, Guillermo Lorentzen y el escritor haitiano René Depestre, directivos que describieron las diversas colecciones, entre ellas: “Vidas de Grandes Hombres”, “Viajes y Reportajes”, “Biblioteca Histórica”, “Obras Cubanas” y “Enciclopedia Popular”. Esta última dedicada a los obreros, campesinos y soldados rebeldes que aún no habían cursado la enseñanza primaria. Asimismo, aseguraron que en los planes estaba la impresión de obras cumbres de la literatura universal y cubana de todas las épocas, como “La Isla del Tesoro”, de Robert Louis Stevenson; “La guerra de los mundos”, de Herbert G. Wells; “Las aventuras de Tom Sawyer”, de Mark Twain; “La Revolución Francesa”, de Albert Mathiez; “Los compañeros de Colón”, de Washington Irving; “Memorias de un hombre de acción”, de Pío Baroja; “Cecilia Valdés”, de Cirilo Villaverde; “Poemas”, de Nicolás Guillén; “El reino de este mundo”, de Alejo Carpentier, entre otras.

El periodista se refirió, además, a la loable gestión editorial de la Universidad Central de Las Villas, distinguida por “la gran pulcritud tipográfica” de sus libros. Mencionó también a “Ediciones R”, creada por el grupo de jóvenes nucleados en torno a “Lunes de Revolución”, suplemento cultural del diario “Revolución”. Esta empresa, según habían expresado los gestores en su revista, tenía el propósito de: “(…) favorecer la creación poética y literaria, y el fortalecimiento del pensamiento social y filosófico en la nación”(3).  Para López Nussa, con “Ediciones R” se divulgaría una categoría de libro menos comercial.

Algunas de las fotografías presentadas en el reportaje captaron a los antiguos repartidores del periódico “El País”, mientras laboraban como encuadernadores de la edición inicial de “El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha”, de Miguel de Cervantes Saavedra. Con esta novela se inauguraría la colección “Obras Maestras de la Literatura Universal”. Otra de las instantáneas descubrió a los obreros en plena faena dentro del taller gráfico, otrora “La Marina”. En esa ocasión preparaban “Robinson Crusoe”, de Daniel Defoe, primer título que integraría la Biblioteca Juvenil. Varias portadas de diferentes libros fueron reproducidas, entre las que se encontraban dos impresas en los talleres tipográficos del INRA. No faltaron las imágenes de los lectores en las librerías, durante las búsquedas de un texto de su preferencia. 

Sobre este boom editorial hablaría el poeta chileno Pablo Neruda durante la entrevista que le hiciera Fayad Jamis para “INRA”, en enero de 1961. Así significó: “La Revolución ha traído una gran floración y fecundidad editorial. Las editoriales siempre estuvieron fuera de Cuba. Ahora se publica aquí una gran cantidad de obras. Como van las cosas, Cuba será uno de los centros más importantes del libro en América Latina (4)”.  Muy próxima estaba la circulación en la Isla de 30 mil ejemplares de su último poemario titulado “Canción de Gesta”, gracias a la laboriosidad de los trabajadores de la Imprenta Nacional de Cuba. 

Un cambio sin precedentes en el país se generaba en la conciencia de una parte de la población: se incrementaba el interés por aprender, conocer y adquirir cultura. Tales aspiraciones aumentarían luego de culminar la Campaña de Alfabetización en diciembre de 1961 y promoverse el estudio en los diferentes niveles de enseñanzas, incluida la universidad. Para ello era fundamental la impresión de libros y revistas ofertados a un precio asequible al poder adquisitivo de la mayoría. Tal proeza fue hecha realidad en aquellos años en los que tuvo plena vigencia la máxima martiana de “Ser culto es el único modo de ser libre”.

 Notas bibliográficas

(1) López Nussa, L.: “Aventuras del pensamiento: el nuevo libro cubano”, INRA, 7: 90-suplemento XIII, La Habana, agosto de 1960.

 (2) Ponce Suárez, V. N.: La revista INRA (1960-1962): incidencia de los mediadores comunicacionales y entorno mediático en sus peculiaridades. Informe final de investigación. Departamento de Investigaciones. Biblioteca Nacional de Cuba José Martí. La Habana, 2021.

 (3)“El nacimiento de una editorial”, Lunes de Revolución, 61: 10, La Habana, 30 de mayo de 1960.

(4) Jamis, F.: “Neruda en Cuba”, INRA, 1: [16]-[19], La Habana, enero de 1961.