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Foto de Biblioteca Abierta en la Biblioteca Nacional de Cuba José Martí en este día de Aniversario de la desaparición física de nuestro lider histórico.

Biblioteca Abierta en la Biblioteca Nacional de Cuba José Martí en este día de Aniversario de la desaparición física de nuestro lider histórico.

25/11/2023
Por: Eddy Rodríguez Garcet, Biblioteca Nacional José Martí

Este sábado en nuestro espacio de Biblioteca Abierta se está desarrollando el 48 Encuentro Debate Provincial de Talleres Literarios de l del Centro Provincial de Casas de Cultura de La Habana, con una amplia presencia de talleristas e instructores de todos los municipios, comenzo la misma con un minuto de silencio, seguidamente se inauguró la exposición bibliográfica dedicada al Aniversario de la desaparición física de nuestro máximo líder el Comandante Fidel Castro Ruz, en esta exposición se exponen fotos, carteles y documentas significativos en la vida de nuestro querido Fidel , en esta inauguración José Antonio Doll Pérez, especialista del Área de Manuscritos de Colección Cubana y Presidente de la Sección de Base de la UNHIC en la Biblioteca Nacional de Cuba José Martí, leyó un comunicado a nombre de nuestra institución, además Hansruel Aldana, profesor instructor de literatura de la Casa de Cultura de Arroyo Naranjo nos declamó el poema `Marcha triunfal del Ejército Rebelde, de Jesús Orta Ruiz (El Indio Naborí).

Como parte de las actividades en la Sala Infantil y Juvenil Eliseo Diego se realiza el Torneo Provincial por equipo de La Habana, Grupo Promotor  Scrabble QBA. 


Palabras  José Antonio Doll

Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, a siete años de la partida física del Líder Histórico de la Revolución Cubana.

Nuestro Fidel, vivo en nuestros corazones y en los de todo el mundo progresista, honesto y agradecido, constituye un titán de la lucha por nuestras libertades. Dirigió extraordinariamente la participación de cientos de miles de combatientes cubanos en misiones internacionalistas en Argelia, Siria, Angola, Guinea Bissau, Etiopia y otros países, los que hoy mucho lo agradecen, e impulsó y organizó el aporte de miles de médicos, maestros y técnicos de la Isla que han prestado y hoy siguen prestando servicios en más de 40 países del llamado Tercer Mundo, la realización de estudios en Cuba por parte de decenas  de miles de estudiantes de esas naciones, e impulsó los programas integrales de asistencia y colaboración de la Mayor de las Antillas en materia de salud en numerosos países de África, América Latina y el Caribe. Y la creación de escuelas internacionales de Ciencias Médicas, Deporte y Cultura Física, entre otras disciplinas, para estudiantes de los mismos. Promovió a escala mundial la batalla del Tercer Mundo contra el orden económico internacional vigente, particularmente contra la deuda externa, el despilfarro de recursos como consecuencia de los grupos militares y la globalización neocolonial, y los esfuerzos por la unidad e integración de América Latina y el Caribe. Fue el máximo impulsor del movimiento de países No Alineados, y vale la pena resaltar su irreductible apoyo a las causas del pueblo Saharaui y del sufrido pueblo palestino quien desde hace 75 años enfrenta la siempre creciente hostilidad del Estado de Israel, con apoyo del imperialismo norteamericano y de otras potencias, que se ha volcado sobre la población de Gaza, con miles de víctimas producto del constantes bombardeos iniciados desde el pasado 7 de octubre, y que condenamos enérgica y decididamente.

Encabezó la acción decidida de nuestro pueblo para enfrentar los efectos del bloqueo económico, comercial t financiero impuesto por Estados Unidos desde hace más de 60 años y hoy vilmente recrudecido, a espaldas del clamor mundial, y las consecuencias   en el plano económico del derrumbe de la comunidad socialista europea, promovió el esfuerzo tenaz de los cubanos para superar las grandes dificultades resultantes de estos factores, su asistencia durante el llamado Periodo Especial y el reinicio del crecimiento y desarrollo económico del país. 

Durante casi 50 años impulsó y dirigió la lucha por la consolidación de los procesos revolucionarios, su avance hacia el socialismo, la unidad de las fuerzas revolucionarias y de todo el pueblo, la transformación económica y social del país, el desarrollo de la educación, la salud, el deporte, la cultura la ciencia y la defensa, el viral enfrentamiento a las agresiones externas, la conducción de una activa política exterior de principios, las acciones de solidaridad con los pueblos que luchan por la independencia y el progreso, y la profundización de la conciencia revolucionaria, internacionalista y comunista del pueblo.

En sus últimos años escribió sobre los problemas del mundo contemporáneo en numerosas reflexiones y brillantes artículos publicados en medios cubanos, y dedicó ingentes esfuerzos a proyectos relacionados con la agricultura y la alimentación humana y animal. Por su innegable autoridad moral, influyó en importantes y estratégicas decisiones de la revolución. Su vida no puede reducirse a unas pocas líneas, pues su permanente en indisoluble vínculo con el pueblo, su brillante oratoria, su constante magisterio, su entrega sin límites a la causa de la revolución ha dejado una huella imborrable en nuestro pueblo y han servido de inspiración para millones de hombre y mujeres de todos los continentes.

Las futuras generaciones de cubanos tendrán en él, como en José Martí, un paradigma y una motivación profunda para dar continuidad a su imperecedera obra, aun en medio de las difíciles y complejas circunstancias por las que atraviesa nuestro país por las razones ya conocidas.

¡Que viva siempre en nuestro accionar y en nuestros corazones el ejemplo de nuestro invencible Comandante en Jefe!

¡Patria o muerte!

¡Venceremos!


Poema de Jesús Orta Ruiz,  `Marcha triunfal del Ejército Rebelde.` Declamado por Hansruel Aldana, profesor instructor de literatura de Casa de Cultura del municipio Arroyo Naranjo. 

¡Primero de Enero!

Luminosamente surge la mañana.

¡Las sombras se han ido! Fulgura el lucero

de la redimida bandera cubana.

El aire se llena de alegres clamores,

se cruzan las almas saludos y besos,

y en todas las tumbas de nobles caídos revientan las flores

y cantan los huesos.

Pasa un jubiloso ciclón de banderas

y de brazaletes de azabache y grana,

mueve el entusiasmo balcones y aceras,

grita desde el marco de cada ventana.

A la luz del día se abren las prisiones

y se abren los brazos: se abre la alegría

como roja rosa en los corazones

de madres enfermas de melancolía.

Jóvenes barbudos, rebeldes diamantes,

con trajes de olivo vienen de las lomas,

y por su dulzura, los héroes triunfantes

parecen armadas y bravas palomas.

Vienen vencedores del hambre y el frío

por el ojo alerta del campesinado

y el amparo abierto de cada bohío...

Vienen con un triunfo de fusil y arado.

Vienen con sonrisa de hermano y amigo,

vienen con pureza de vida rural,

vienen con las armas que al ciego enemigo

quitó el Ideal.

Vienen con el ansia del pueblo encendido,

vienen con el aire y el amanecer,

y, sencillamente, como el que ha cumplido

un simple deber.

No importan los días de guerra y desvelo,

no importa la cama

de piedra o de grama,

sin otra techumbre que ramas y cielo.

No importa el insecto, no importa la espina,

la sed consolada con parra del monte,

la lluvia, los vientos, la mano asesina

siempre amenazando en el horizonte.

¡Sólo importa Cuba, sólo importa el sueño

de cambiar la suerte!

¡Oh, nuevo soldado que no arruga el ceño,

ni viene asombrado de tutear la muerte!

Los niños lo miran pasar aguerrido

y piensan, crecidos por la admiración,

que ven un rey mago rejuvenecido

y con cinco días de anticipación.

Pasa fulgurante Camilo Cienfuegos,

alumbran su rostro cien fuegos de gloria.

Pasan capitanes, curtidos labriegos

que vienen de arar en la Historia…

Con los invasores pasa el Che Guevara,

alma de Sarmiento que trepó el Turquino,

San Martín quemante sobre Santa Clara,

Maceo del Plata, Gómez argentino...

Pasan lindas reinas sin otras coronas

que su sacrificio: cubanas marciales,

gardenias que un día se hicieron leonas

al beso de doña Mariana Grajales...

Ya entre los mambises del bravío Oriente,

sobre un mar de pueblo, resplandece un astro,

ya vemos la cálida frente;

el brazo pujante, la dulce sonrisa de Castro...

Lo sigue radiante su hermano Raúl,

y aplauden al paso del héroe ciudades quemadas,

ciudades heridas que serán curadas

y tendrán un cielo sereno y azul.

Fidel fidelísimo, retoño martiano,

asombro de América, titán de la hazaña

que desde las cumbres quemó las espinas del llano

y ahora riega orquídeas, ¡flores de montaña!

Y esto que las hieles se volvieran miel,

se llama... ¡Fidel!

Y esta que la ortiga se hiciera clavel,

se llama… ¡Fidel!

Y esto que la patria no sea un cuartel,

se llama… ¡Fidel!

Y esto que la bestia fuera derrotada por el bien del hombre,

esto que la sombra se volviera luz,

esto tiene un nombre, sólo tiene un nombre:

FIDEL CASTRO RUZ.


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