Curioso manual del siglo XVII sobre enfermedades de madres y recién nacidos.

1/10/2020
Por: Olga Vega García, Biblioteca Nacional José Martí

Se ha decidido seleccionar un volumen original publicado en el Siglo XVII que aborda el tema desde el punto de vista médico y que corresponde a una época en la que las mujeres científicas no eran aceptadas en la vida académica no obstante el nivel de conocimiento que adquirieran en su actividad práctica.

En este caso se trata de una comadrona francesa, Louise Bourgois  sobre la cual se repiten en fuentes consultadas datos sobre su vida y obra. Resulta interesante no solamente el reconocimiento alcanzado por ella en la corte real francesa sino además que esa experiencia la divulgó publicando libros en pleno Renacimiento para disminuir la mortalidad de madres e infantes.

Ya en Paris, en 1573 el famoso cirujano francés Ambroise Paré (c. 1510-1590)  se dedicó al tema con su De la generación del hombre y manera de extraer a los niños del vientre de su madre y la cura de las enfermedades que pueden sobrevenirla. En otras ciudades europeas aparecen nuevos títulos que recogen normas para evitar accidentes en el parto y en el puerperio. Esa obra ayudaba a las parteras y comadronas que accedieron a ellos para enriquecer lo ya conocido en la práctica diaria y así muchas de ellas lograron adquirir reconocimiento en la sociedad y en particular en las cortes.

 Louise Bourgeois (1563-1636), es conocida también como Louise Boursier; nació en el Faubourg Saint-Germain, y por  pertenecer a la burguesía francesa recibió una educación no habitual en aquel entonces para una mujer. En 1584 se casó con el cirujano militar Martín Boursier, ayudante del antes citado  Ambroise Paré. A los 24 años, había tenido tres hijos y llegó a encontrarse sin recursos ante el reclutamiento de su esposo en la Armada del Rey lo que la hizo tomar decisiones que le facilitaron ir adquiriendo un renombre.

En 1593 ya estaba ejerciendo como partera en uno famosos hospitales construidos en la Edad Media, los Hotel-Dieu, "casas de Dios", creados para atender a pobres, enfermos y desvalidos. Allí se dedicó a establecer un primer plan docente para la formación de matronas y volcaría su experiencia en una serie de tratados obstétricos. A partir de su obra más conocida, publicada en 1609: Observations diverses sur la stérilité, perte de fruits, fécondité, accouchements et maladies des femmes et enfants nouveau-nés [i. e.] Observaciones diversas sobre la esterilidad, la pérdida del fruto, fecundidad, parto, enfermedades de la mujer y del recién nacido]  se producirán otras versiones: latina(1619), alemana(1628) holandesa(1658) e inglesa (1659) convirtiéndose en el más importante tratado científico sobre la especialidad ginecológica y obstétrica de la época.

Es curioso que se imprime inicialmente en francés y no en latín como era costumbre entre muchos científicos. Resulta comprensible para cualquier lector que domine ese idioma, aún ajeno a la materia por lo sencillo del estilo empleado.

Luego que obtuvo la debida licencia para practicar su profesión en 1598, fue escogida por su nivel de profesionalidad para asistir al parto de la reina María de Médicis (1573-1642), segunda esposa de Enrique IV (1569-1610) del que nacería el futuro rey de Francia, Luis XIII (1601-1643), convirtiéndose por tanto en la partera real.

La edición atesorada en la colección de impresos raros y valiosos de la Biblioteca Nacional de Cuba José Martí:Observations diverses sur la sterilite perte de fruict foecondité, accouchements et maladies des femmes et enfants nouveaux naiz... / par L. Bourgeois dite Boursier... conserva sus tres portadas, la primera grabada en metal fechada en 1642, una segunda en 1642 y la tercera en 1626. Aparece encuadernada junto a su Recueil des secrets, de Louise Bourgeois dite Boursier, sage-femme de la Reine mere du Roi, auquel sont contenues ses plus rares experiences pour diverses maladies, principalement des femmes, avec leurs embellissemens, producida igualmente en la capital francesa por el mismo editor en 1635.

Como material ilustrativo incluye portada grabada con  motivos alegóricos al uso de la época, retrato de la autora a la edad de 45 años, orlas y letras capitales.

Las portadas independientes para los diversos títulos que componen el volumen mantienen la  marca tipográfica de Melchior Mondiere como puede observarse.      

Al igual que en el caso de otras obras de carácter eminentemente práctico el volumen fue muy consultado a consecuencia de lo cual su estado de conservación conllevó una imprescindible labor de restauración y reencuadernación. La constante manipulación, antigüedad de la edición  y el ataque de agentes biológicos provocaron faltantes en el papel, como ha de observarse en las imágenes escaneadas. Pero aún así en sus páginas queda latente una historia de un tiempo pasado y se ratifica la constante de que esos libros si bien llegaron nuestros días  muy deteriorados dan fe de su utilidad a lo largo de los siglos.