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Foto de De la historia contada por las revistas cubanas de los sesenta .  “Pensamiento Crítico”, un escalón imprescindible como homenaje al Guerrillero Heroico

De la historia contada por las revistas cubanas de los sesenta . “Pensamiento Crítico”, un escalón imprescindible como homenaje al Guerrillero Heroico

8/10/2020
Por: Vilma N. Ponce Suárez, Biblioteca Nacional José Martí

Días antes de la declaración oficial por Fidel Castro de la muerte del comandante Ernesto Che Guevara, varios profesores de Filosofía conocieron de la dolorosa pérdida. Se hallaban en la Agencia de Noticias Prensa Latina buscando materiales para su revista “Pensamiento Crítico”, cuando el periodista brasileño Aroldo Wall les confirmó lo ocurrido. De inmediato, decidieron incorporar un cartón suelto en cada ejemplar del número de septiembre que ya estaba impreso, donde manifestaron que el verdadero homenaje al Che, y el único posible, lo realizaban “(…) los pueblos con tableteo de ametralladoras y nuevos gritos de guerra y de victoria”. Constituía una frase familiar para los cubanos, pues con ella Ernesto Guevara había culminado su histórico “Mensaje a la Tricontinental”, divulgado en el país en abril de 1967. 

José Bell Lara, uno de aquellos docentes, me relató en una entrevista que bajo la dirección de Fernando Martínez Heredia el equipo de redacción preparó con celeridad la siguiente edición dedicada íntegramente al Guerrillero Heroico; y precisó: “Fue un trabajo ininterrumpido durante 48 horas. Conseguimos además materiales que eran en ese momento inéditos, aunque después la revista tardó un poco en salir de la imprenta”. 

Cuando circuló el número nueve de “Pensamiento Crítico”, resultó un éxito editorial, porque constituía la selección más completa lograda hasta ese momento de la obra del comandante Guevara. Por primera vez se publicaban dos misivas dirigidas a su hija Hildita, la del 15 de febrero de 1966, y la que titularon “En vuelo – Cairo”. Discursos, conferencias, artículos y otros documentos fueron agrupados con los siguientes encabezamientos: “Che, teórico de la revolución”, “Che, dirigente en las transformaciones revolucionarias”, “Che y la juventud”, “Che, y el papel de la mujer”, “Che y la Historia de Cuba”, “Che y las cuestiones internacionales”, “Cartas” y “El Patojo”. 

Por la significativa demanda que tuvo la revista de octubre del 67, el Consejo de Redacción decidió que el número catorce (marzo 1968), fuera una reedición. Pero no resultaron idénticos, pues a este último se le incorporaron los artículos del Che “Sobre el sistema presupuestario de financiamiento” y “La planificación socialista, su significado”. Se diferenciaron además, porque en esta oportunidad los trabajos no se organizaron por temáticas, como en el anterior. Así, por ejemplo, las palabras del Che recordando al comandante Camilo Cienfuegos las publicaron de manera independiente, mientras que en el número nueve se ubicaron dentro del epígrafe “Che y la historia de Cuba”.   

De igual forma, las portadas y las ilustraciones de los números tuvieron sus diferencias. Aunque seleccionaron la misma fotografía del Che para las presentaciones, tomada durante la batalla de Santa Clara, en la edición de marzo del 68 esta imagen se reprodujo tres veces de manera escalonada, con lo cual quisieron afirmar la perpetuidad de su ejemplo. 

En las páginas del nueve, el diseñador Alfredo González Rostgaard intercaló varias veces un mismo dibujo del rostro de Guevara, con diversas frases suyas, en las que se auto reconocía, ante todo, como latinoamericano. En la edición catorce, el diseñador Luis Balaguer tuvo la idea de incluir ilustraciones creadas por niños de 6 a 12 años, quienes ofrecieron su visión de la participación del Che en las luchas por la liberación de Cuba y América.

Los números de “Pensamiento Crítico” dedicados al comandante Ernesto Che Guevara contribuyeron a la difusión de sus ideas, no solo en la Isla, sino también en otras partes del mundo. Los profesores del Departamento de Filosofía de la Universidad de La Habana consideraron estas obras “(…) un homenaje, un saludo, un escalón imprescindible en la necesaria tarea de templar las armas y las mentes”.