Programa Nacional por La Lectura. Reseña. “La flor más grande del mundo”, José Saramago

19/8/2021
Por: Ana Laura Escalona Díaz , Biblioteca Nacional José Martí

Importantes autores como José Saramago, premio nobel de literatura (1998) se han acercado al mundo de la literatura infanto-juvenil de una forma peculiar. Así lo demuestra en su título “La flor más grande del mundo”, en el cual comienza confesando su tristeza por nunca haber sido capaz de aprender a escribir historias para niños. Sin embargo, esta es una historia que atrae a todas las personas más allá de su edad. En su contraportada se lee: ¿Y si las historias para niños fueran de lectura obligatoria para los adultos?

¿Seríamos realmente capaces de aprender lo que, desde hace tanto tiempo, venimos enseñando?   

Este libro, de la editorial Alfaguara (2001) ilustrado por Joao Caetano, narra de manera muy cercana y con imágenes como de recorte de periódicos la historia de un niño con valores que muchas personas adultas carecen. Este personaje vive una aventura que rápidamente cambia el propósito de sus días. Sin darse cuenta descubre que debe salvar a una flor que el mundo había olvidado. De manera humilde, silenciosa y constante el niño muestra el valor de cuidar el medio ambiente, de comprometerse con una realidad más allá del límite de su campo. 

Para las niñas y niños también es importante acercarse desde edades tempranas a un mundo diferente al de los cuentos de hadas, príncipes, dragones y princesas. Aproximarse a un mundo donde sus protagonistas sean parecidos a ellas y ellos, con diferentes paisajes tanto citadinos como rurales, y sean valorados como personas capaces de hacer grandes tareas sin importar su tamaño. Sin dudas, este cuento  en doce páginas merece la pena de ser disfrutado y analizado, pues de manera espontánea y sincera refleja la esencia humana en su vínculo con la naturaleza.