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Foto de Programa Nacional por la Lectura. Escritoras cubanas. Reseña. Antología lírica, de Dulce María Loynaz.

Programa Nacional por la Lectura. Escritoras cubanas. Reseña. Antología lírica, de Dulce María Loynaz.

2/3/2022
Por: Maribel Duarte González, Biblioteca Nacional José Martí

El Programa Nacional por la Lectura y el Programa de Adelanto de la mujer (PAM) de la Biblioteca Nacional de Cuba José Martí estarán presentando desde el primero de marzo y hasta el día 8, en que estaremos celebrando el Día Internacional de la mujer, reseñas de libros de escritoras cubanas, como digno homenaje a la labor literaria de las mujeres en Cuba. 

Hoy le remendamos la Antología lírica de Dulce María Loynaz

La Antología lírica que ofrecemos, recoge una selección de la obra poética y narrativa de Dulce María Loynaz, y nos introduce en la lectura de unas páginas que alcanzan en la fusión de prosa y verso sus momentos más sublimes 

Dulce María Loynaz (1902-1997 es la gran dama de las letras cubanas. Mujer culta y exquisita, de presencia frágil pero de fuerte personalidad poética y de una constante inquietud literaria. En su obra, nutrida de la luz y la fragancia de los paisajes caribeños, se unen lo sensorial y lo metafísico, el erotismo más profundo y la espiritualidad más elevada. Poeta amante de la palabra exacta y del metro libre, define la poesía como bestia divina y salvaje. Su obra posee un  tono lírico e intimista.

Les comparto el poema, que forma parte de esta antología “La mujer de humo”

Hombre que me besas,

hay humo en tus labios.

Hombre que me ciñes,

viento hay en tus brazos.

Cerraste el camino,

yo seguí de largo;

alzaste una torre,

yo seguí cantando...

Cavaste la tierra,

yo pasé despacio...

Levantaste un muro

¡Yo me fui volando!...

Tu tienes la flecha:

yo tengo el espacio;

tu mano es de acero

y mi pie es de raso...

Mano que sujeta,

pie que escapa blando...

¡Flecha que se tira!...

(El espacio es ancho...)

Soy lo que no queda

ni vuelve. Soy algo

que disuelto en todo

no está en ningún lado...

Me pierdo en lo oscuro,

me pierdo en lo claro,

en cada minuto

que pasa... En tus manos.

Humo que se crece,

humo fino y largo,

crecido y ya roto

sobre un cielo pálido...

Hombre que me besas,

tu beso es en vano...

Hombre que me cines:

¡Nada hay en tus brazos!

Este libro lo encontrará disponible más abajo para descarga en el portal de la Biblioteca Nacional de Cuba José Martí.

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