Noticias
Buscar noticia
Programa Nacional por la Lectura. Aniuta, de Antón Chéjov
17/12/2022
Por: Maribel Duarte González, Biblioteca Nacional José Martí
Lo que le pasa a Aniuta tiene que ver con la pobreza. Imaginársela lanzada a la calle en una noche nevada, porque Klochkov, el estudiante de medicina, con quien ha estado viviendo siente vergüenza por las críticas a su habitación y a su descuidado aspecto que le ha hecho el pintor Festisov: `vive usted… como un cerdo.`
`Aniuta`, cuento de Antón Chéjov (1860-1904) es, como muchas de sus narraciones, un texto que causa un efecto emocional inmediato. ¿Pero cómo logra tal efecto el autor? Porque nos hace mirar dentro del cuarto mismo donde se desarrollan los diálogos de las cuatro escenas: Klochov usando a Aniuta como maniquí de anatomía, la entrada de Fetisov para pedir prestado a Aniuta, el monólogo del estudiante de medicina para decidir el futuro de la chica, el regreso de Aniuta para escuchar que le digan que se vaya y después que puede quedarse si lo desea.
Maestro de la dramaturgia, Chéjov recurre a esas descripciones escenográficas, tan bien modeladas ahora con el uso de las cámaras de vídeo, para el cine o la televisión, y desarrolladas magistralmente en el siglo XIX. Uno mira como la delgada Aniuta usada, prestada, sacada de la habitación y al final perdonada. Nos conduele la mujer-florero en que percibimos a esta chica. Chéjov nos ha evidenciado el machismo ruin de aquella época, un machismo clasista, que ocurre desde la universidad: la mujer ignorante le sirve a los juveniles hombres de la historia.
Aniuta es una joven `morenilla de unos veinticinco años, muy delgada, muy pálida, de dulces ojos grises`, que para sobrevivir al frío del clima, al hambre y a la soledad, vive con universitarios en cuartos rentados de estudiantes. Al momento de la narración, el autor nos cuenta que Klochkov es el sexto joven universitario con quien la chica ha vivido en los recientes 6 o 7 años. Desde los 19 años Aniuta ha tenido necesidad de compartir cuarto, colchón y sexo, con estos esporádicos amantes, a los que entrega cariño, voluntad y apoyo, y de los que recibe, al parecer semen, alguna caricia, compañía, durante el tiempo que duren los estudios de los universitarios, y luego es olvidada, desechada.
Chéjov es capaz de evidenciar a esta mujer sumida en la pobreza y cómo es utilizada por estos jóvenes, para servirse de su compañía durante sus estudios, para presumirla un poco: `Todos sus amigos anteriores habían ya acabado sus estudios universitarios, habían ya concluido su carrera, y, naturalmente, la habían olvidado hacía tiempo. Uno de ellos vivía en París, otros dos eran médicos, el cuarto era pintor de fama, el quinto había llegado a catedrático.`
El cuento está disponible para descarga en el Portal de la Biblioteca Nacional de Cuba José Martí